Si hay alguna editorial que consiga anticiparse a mis deseos ésta es Impedimenta. En mi biblioteca es una de las adquisiciones mayoritarias y siempre estoy pendiente de sus novedades. Supongo que coincidimos en gustos y la reedición de algunas obras literarias ambientadas a principios del siglo XX, habitualmente en Gran Bretaña, con el sentido del humor tan especial de la pérfida Albión y de esa época consigue que siempre estén en mi cabecera.
En concreto Bassett es una novela de ese corte, que muestra a la sociedad londinense mediante acontecimientos cotidianos en la vida de unos personajes bastante habituales en este tipo de literatura. La familia adinerada sin preocupaciones que festeja sin razón, la solterona con una vida previsible llena de manías y la señora entrada en años que ha perdido su fortuna viviendo en una situación sumida en la vergüenza.

La casa de huéspedes de La Torre se encuentra ubicada en un frondoso bosque de hayas en pleno Buckinghamshire. La regentan dos extraordinarias mujeres de muy marcada personalidad: la balsámica y lloriqueante señorita Padsoe, que vive atribulada por los desprecios del servicio, y la más joven y práctica señorita Baker, londinense hasta la médula y aficionada a las tostadas y al té bien cargado. Sin embargo, su amistad es mera apariencia pues ambas se odian con todas sus fuerzas. En la vecindad se alza la fastuosa mansión de los Shelling, en la que viven George y su hermana Bell, y en la que se organizan alocadas fiestas dedicadas a los Cerebritos, a los Automovilistas y al Amor Libre. En la casa de los Shelling trabaja como dama de compañía la bella señorita Catton. Entre George y ella surgirá el amor.
Ya había leído varios libros de Stella Gibbons como la saga Flora Poste, Westwood o Navidades en Cold Confort Farm siendo el último de éstos el que más me había gustado. Por lo tanto estaba preparada para los personajes de esa época y lo que más me ha gustado son los apuntes a los grupos sociales del momento, con el comunismo aflorando en la clase media, el amor libre, los comienzos de un feminismo real. Es muy curioso que estas novelas a veces muestran una sociedad más avanzada y abierta en pensamiento que la actual.
Quizá sea exagerado comparar la novela con Wodehouse. El humor absurdo de éste, los personajes estrambóticos, las situaciones desternillantes…no se consiguen en los libros de esta autora. Pero claro, estamos hablando de un maestro, de un genio, de alguien capaz de levantarte el ánimo con un capítulo breve. Bueno, que me pierdo con uno de mis escritores favoritos. Volviendo a Bassett, aunque no logre ese nivel humorístico sí podemos encontrar situaciones muy divertidas y personajes que te dejan con la sonrisa tonta en la boca a lo largo de todo el libro, como el escritor experto en lo que se tercie según el libro de altas ventas que esté preparando.
Para mí leer un libro de este tipo es como volver al hogar. Cómodo, tranquilo, previsible en el mejor de los sentidos. Tras un día agitado o con un problema en la cabeza que no me abandona, lo mejor es perderse en un pueblo de los alrededores de Londres, ser invitada a una fiesta con champán y música clásica y olvidarme del ajetreado siglo XXI.
Comentarios
Publicar un comentario